Venus, nacida de la espuma

 —La Venus d' Arles es una de las obras más bellas y valoradas por los críticos: la diosa posiciona su cuerpo curveado en una 's', símbolo de sensualidad, mientras que deja al descubierto su espalda...—decía el presentador de televisión. Sí, si que era una escultura digna de admirar y ella deseaba poder asemejarse a aquella escultura, sí, a la misma Venus y oraba porque su cuerpo comenzará ya a desarrollarse. Y ella decía:

          "Venus, nacida de la espuma, oh coronada de algas y arrecife, tú que sientes mi cuerpo ajeno y lejano, el que nunca ha sido mío. Me ahogo dentro de este cuerpo no mío, ¡recíbelo y sé propicia conmigo, dame un nuevo cuerpo!"

¿Cómo construir a una chica? Pandora y Eva fueron creadas por divinidades, amoldadas y perfeccionadas para el varón: dotadas de gracia, de hermosura de cuerpo, de elocuencia y castidad. Venus no le envidia nada a ésas dos, al contrario, ella sobresale entre las mismas diosas en belleza y gracia, ¿acaso su epíteto no es 'charis', la Gracia misma? Es por ella que se inició una furtiva batalla en las costas de Ilión, es venerada por todos y el solo toque de su favor hace que al amor se una. Si es así, es por eso que los grandes artistas tanto antiguos como modernos siguen construyendo su imagen en mármol, en piedra o en lienzo, 'la Venus d' Arles' es prueba de ello y la diosa es símbolo de la mujer perfecta. ¿Acaso las chicas es eso lo que nos hace ser chicas? ¿la belleza y la gracia? Es posible que así sea. Las chicas somos como Venus, la escultura inmóvil que posa lo que tiene para ofrecer, exaltadas por nuestra belleza e ingenio cautivador y no hay nada más valioso para ellas que ser ovacionadas y vistas por todos: cuerpos hechos de mármol blanco, de lienzo blanco, de piedra pulida y perfeccionadas con cincel y brochas pintas. Las esculturas no protestan, no hablan, no piensan y si pensarán solo sería para engrandecerse de lo hermosas que están. Ellas solo están para admirar más no para tocar porque pierden su valor estilístico, se manchan, así son las chicas que desean ser más inalcanzables y más ajenas, estas son las favoritas de Venus porque han abandonado el cuerpo ajeno para amoldarse a uno mejor.

Ella siempre ha estado sonámbula porque todavía está en un cuerpo ajeno, Venus no le ha favorecido, pero fue un día donde la diosa le sonrió y la maldijo porque pudo reconocer las miradas malintencionadas de otras personas sobre su cuerpo, era bastante raro que alguien admirase su cuerpo pero que se refiriera a él con comentarios tan filosos e hirientes. Y ella no puede más que decir:

  

 "Venus, la nacida de la espuma, se burló y me maldijo. ¿Qué tanto pude haber esperado? Ahora mi cuerpo se metamorfoseó en algo más ajeno y lejano, ¿maldecida o bendecida? No lo sé, no lo sé. Desesperada estoy de vivir con el cuerpo que me otorgaste y que es moldeada por personas infames. ¡Ay de mí!"

Al fondo de una galería, se muestra la réplica de la "Venus d' Arles" totalmente iluminada y arreglada con flores, en la parte inferior se encuentra escrito: 'Tocar. Una escultura sin autor se deja hacer'. La estatua llora porque ahora es reflejo de ella misma. 

Imagen de la Venus d'Ales en el museo del Louvre, cortesía de Arte y cultura (tumblr.com) (José Andres Tabarnia)

Linda Lovelace por Milton H. Greene, 1973: